Planteado así, muchos de los que van a votar al PP no lo harían.
Pero la realidad es que la extrema derecha no necesita presentarse a las votaciones, pues está perfectamente representada en el partido popular.
La mayoría de las personas que se consideran de extrema derecha, cerca de un 80%,van a votarles.
Las razones son muy simples, en los temas como inmigración, nacionalcatolicismo, derechos a las minorías (étnicas, sexuales, religiosas, etc., etc.) la coincidencia es al 100%.
En materia de favorecer a unas clases en contra de otras, la coincidencia, si fuera posible, estaría al 120%.
En materias como protección medioambiental, la realidad es que ni interesa al PP ni interesa a la extrema derecha.
Así se podría recorrer todo el abanico de posibilidades y quedaría claro las razones de que no exista en España un partido como el de Jean Marie Le Pen
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