A la gente "hay que decirle la verdad", que se trata de una situación muy difícil, pero que "vamos a poner en marcha políticas que la van a ir corrigiendo"
La candidata de Compromís a la Presidencia de la Generalitat, Mònica Oltra, asegura que su formación no va a "prometer milagros", pues la situación en la que el PP ha dejado a la Comunitat Valenciana "no se arregla en dos meses ni en dos años", pero sí se comprometerá con las personas.
En una entrevista afirma que hay dos emergencias, la social y la democrática, que deberán combatirse "desde el primer minuto en que haya un cambio de gobierno", pero advierte de que las cosas no cambiarán el 25 de mayo "aunque las elecciones -del día anterior- hayan dado una buena sacudida al panorama electoral".
A la gente "hay que decirle la verdad", que se trata de una situación muy difícil, pero que "vamos a poner en marcha políticas que la van a ir corrigiendo", plantea la dirigente de Compromís, para quien lo primero será "asomarse al agujero" que ha dejado el PP y ver "las dimensiones que tiene".
"Igual tiene que venir Stephen Hawking a decirnos qué dimensión tiene ese agujero negro", bromea Oltra, a quien no le asusta lo que pueda encontrarse en caso de formar parte del futuro gobierno de la Generalitat, pues cree que siempre hay margen de actuación.
Revisión de la financiación
Éste vendría dado primero por la revisión del sistema de financiación, que a su juicio "no es sostenible ni un minuto más", y por la vía de los impuestos, pero también a través de "una buena gestión".
"Hemos perdido mucho dinero por la corrupción y el desvío de dinero, pero estoy convencida de que hemos perdido todavía más por la mala gestión", asegura la aspirante, quien cree que "todos juntos podemos salir de ésta", pero insiste en que no va a prometer "milagros".
Oltra da por hecho el cambio político en la Comunitat no solo porque está segura de que en la próxima legislatura desaparecerán las mayorías absolutas, sino porque, además, ve difícil que alguien "pueda pactar con un partido tan podrido como el PP".
Este partido, asegura, "tiene que hacer una profunda limpieza en su casa para volver a ser un partido dentro de la decencia política", pues hasta el president de la Generalitat, Alberto Fabra, "es presidente gracias a la corrupción", denuncia.
En esta región probablemente no habría habido "una corrupción tan generalizada si no hubiera habido un mal uso y un abuso de esa mayoría absoluta", por lo que cree "muy valioso" un futuro en el que no las haya y en el que la palabra "se vuelva a poner en el centro de la política".
Para este escenario, considera que Compromís tiene mucho ganado gracias a las discusiones y debates abiertos en su seno para configurar un reglamento de primarias, que, según dice, les han enseñado a saber gestionar la diversidad y a poner en valor lo que el otro piensa.
"Visibilidad" de todo el mundo
Según la parlamentaria, los integrantes de esta coalición han logrado "que todo el mundo tenga visibilidad" y que no sea el 50 % el que "arrasa al resto". "Lo que queremos para la sociedad lo estamos aplicando dentro de casa", defiende.
Oltra cree que en esta elecciones hay espacio para la diversidad, aunque no descarta y está abierta a la posibilidad de un gran pacto electoral entre aquellas formaciones que están a favor del cambio, de la reconstrucción democrática y de la ruptura con la injusticia.
Sin embargo, condiciona esos acuerdos a que se respete la "visibilidad" de quienes lo integren, y reconoce que existe sintonía con otros partidos, como Podemos, pero también diferencias.
La principal, en su opinión, "la ausencia total de discurso medioambiental en el resto de fuerzas políticas", y la manera de entender el poder, pues para Oltra, "la mayoría de fuerzas políticas de este país siguen intentando conseguir el poder y acumularlo", cuando de lo que se trata es de "limitarlo y separarlo".
Respecto al futuro de Compromís, cree que están bien como están y que los cambios que puedan dar dentro de su estructura organizativa "vendrán de manera natural" si sienten la necesidad colectiva de darlos, y asegura que su compromiso está con esta coalición por ser el proyecto en el que se siente "a gusto", con el que "más sintonía" tiene y "más identificada" se siente.
lasprovincias
La candidata de Compromís a la Presidencia de la Generalitat, Mònica Oltra, asegura que su formación no va a "prometer milagros", pues la situación en la que el PP ha dejado a la Comunitat Valenciana "no se arregla en dos meses ni en dos años", pero sí se comprometerá con las personas.
En una entrevista afirma que hay dos emergencias, la social y la democrática, que deberán combatirse "desde el primer minuto en que haya un cambio de gobierno", pero advierte de que las cosas no cambiarán el 25 de mayo "aunque las elecciones -del día anterior- hayan dado una buena sacudida al panorama electoral".
A la gente "hay que decirle la verdad", que se trata de una situación muy difícil, pero que "vamos a poner en marcha políticas que la van a ir corrigiendo", plantea la dirigente de Compromís, para quien lo primero será "asomarse al agujero" que ha dejado el PP y ver "las dimensiones que tiene".
"Igual tiene que venir Stephen Hawking a decirnos qué dimensión tiene ese agujero negro", bromea Oltra, a quien no le asusta lo que pueda encontrarse en caso de formar parte del futuro gobierno de la Generalitat, pues cree que siempre hay margen de actuación.
Revisión de la financiación
Éste vendría dado primero por la revisión del sistema de financiación, que a su juicio "no es sostenible ni un minuto más", y por la vía de los impuestos, pero también a través de "una buena gestión".
"Hemos perdido mucho dinero por la corrupción y el desvío de dinero, pero estoy convencida de que hemos perdido todavía más por la mala gestión", asegura la aspirante, quien cree que "todos juntos podemos salir de ésta", pero insiste en que no va a prometer "milagros".
Oltra da por hecho el cambio político en la Comunitat no solo porque está segura de que en la próxima legislatura desaparecerán las mayorías absolutas, sino porque, además, ve difícil que alguien "pueda pactar con un partido tan podrido como el PP".
Este partido, asegura, "tiene que hacer una profunda limpieza en su casa para volver a ser un partido dentro de la decencia política", pues hasta el president de la Generalitat, Alberto Fabra, "es presidente gracias a la corrupción", denuncia.
En esta región probablemente no habría habido "una corrupción tan generalizada si no hubiera habido un mal uso y un abuso de esa mayoría absoluta", por lo que cree "muy valioso" un futuro en el que no las haya y en el que la palabra "se vuelva a poner en el centro de la política".
Para este escenario, considera que Compromís tiene mucho ganado gracias a las discusiones y debates abiertos en su seno para configurar un reglamento de primarias, que, según dice, les han enseñado a saber gestionar la diversidad y a poner en valor lo que el otro piensa.
"Visibilidad" de todo el mundo
Según la parlamentaria, los integrantes de esta coalición han logrado "que todo el mundo tenga visibilidad" y que no sea el 50 % el que "arrasa al resto". "Lo que queremos para la sociedad lo estamos aplicando dentro de casa", defiende.
Oltra cree que en esta elecciones hay espacio para la diversidad, aunque no descarta y está abierta a la posibilidad de un gran pacto electoral entre aquellas formaciones que están a favor del cambio, de la reconstrucción democrática y de la ruptura con la injusticia.
Sin embargo, condiciona esos acuerdos a que se respete la "visibilidad" de quienes lo integren, y reconoce que existe sintonía con otros partidos, como Podemos, pero también diferencias.
La principal, en su opinión, "la ausencia total de discurso medioambiental en el resto de fuerzas políticas", y la manera de entender el poder, pues para Oltra, "la mayoría de fuerzas políticas de este país siguen intentando conseguir el poder y acumularlo", cuando de lo que se trata es de "limitarlo y separarlo".
Respecto al futuro de Compromís, cree que están bien como están y que los cambios que puedan dar dentro de su estructura organizativa "vendrán de manera natural" si sienten la necesidad colectiva de darlos, y asegura que su compromiso está con esta coalición por ser el proyecto en el que se siente "a gusto", con el que "más sintonía" tiene y "más identificada" se siente.
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