Nosotros fuimos a por los terroristas, no a por los independentistas”, asegura Alfredo Pérez Rubalcaba en la entrevista que hoy publica este diario. Y en el mitin organizado en San Sebastián, el dirigente socialista realizó el siguiente pronóstico: “Les hemos quitado las armas, ahora les quitaremos los votos”. Mariano Rajoy, por su parte, sin llegar a desautorizar a la derecha fanática de Mayor Oreja y compañía, hizo un llamamiento al orden en el PP, aseguró que era el momento de “tener grandeza” y reclamó inteligencia para no “hacerle la campaña” a la izquierda abertzale. Ambos candidatos, por tanto, han tomado nota del nuevo panorama político abierto en Euskadi, un escenario donde el temor a las balas ha dejado por fin paso a la pelea por los votos.
La existencia de una organización criminal como ETA era el mayor obstáculo para que avanzara el independentismo en Euskadi, según confesaban en privado políticos españoles y vascos de todos los partidos. Los únicos que no parecían ver ese hecho eran los propios terroristas. Por eso, es previsible que la izquierda abertzale obtenga unos excelentes resultados el próximo 20-N y en las autonómicas vascas previstas para 2013.
No hace falta tener dotes adivinatorias para saber que los portavoces del nacionalismo español intentarán demonizar a los independentistas vascos. Pero no debemos olvidar la máxima que justamente se le ha recordado durante décadas a Batasuna: sin violencia, todas las ideas democráticas se pueden defender libremente y en igualdad de condiciones.
Vía: Público
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